CASTILLO DE JAVIER

El castillo de Javier está situado en una loma de la localidad de Javier, en Navarra, a 52 km al este de Pamplona capital y 7 km al este de Sangüesa. Data del siglo X. En este castillo nació y vivió San Francisco Javier, hijo de los Señores de Javier, y de aquí tomó su apellido. Es lugar de peregrinación, especialmente a principios de marzo, en las llamadas Javieradas.

ETIMOLOGÍA
El nombre de Javier proviene del euskera etxeberri (‘casa nueva’), que en su evolución se transformó en javier. La grafía original es Xavier, mientras que en vasco se escribe Xabier.

CONSTRUCCIÓN
Consta de tres cuerpos, sucesivamente escalonados en orden de antigüedad. Destacan la “Torre del Santo Cristo”, bastión y capilla donde se encuentra un interesante crucifijo tardogótico y una serie de pinturas murales representando la danza de la muerte, única en España; la “Torre del Homenaje”, llamada de San Miguel (lo más antiguo del castillo) y el museo dedicado a la vida del santo. En sus basamentos hay huellas y zócalos musulmanes que podrían ser del siglo X. En el XI se formó el primer recinto envolvente que cobijó las primeras habitaciones. En el siglo XIII se agregaron, por las cuatro orientaciones, dos cuerpos poligonales y dos torres flanqueantes.

HISTORIA
El castillo y la villa de Javier fueron ganados por Sancho VII de Navarra en torno al año 1223. Un noble aragonés los había dado como garantía por un préstamo de 9.000 sueldos que le concedió el monarca navarro, pero al acabar el plazo y no poder hacer frente al pago, pasaron a la propiedad de Sancho. No era la primera vez, ni sería la última, pues Sancho VII fue uno de los grandes prestamistas de la Corona de Aragón, y gracias a los préstamos no devueltos, se adueñó de una serie de villas y castillos entregados como aval que le ayudaron a reforzar sus fronteras con Aragón: Escó, Peña, Petilla, Gallur, Trasmoz, Sádaba, etc.

En 1236 el castillo fue entregado por el rey Teobaldo I a Adán de Sada.

Tras la conquista de Navarra el castillo y la villa como feudo pertenecían a María de Azpilcueta, oriunda del Valle de Baztán, casada con Juan de Jaso, cuya familia defendía la independencia del reino.

Por este motivo el Cardenal Cisneros ordenó la demolición completa del castillo en 1516, aunque sólo se realizó un desmochando de la parte fuerte del mismo:1​

Se derribó toda la muralla que lo rodeaba y que estaba guarnecida de almenas y aspilleras.
· Se rellenó el foso, igualándolo al terreno.
· Se destruyeron dos grandes portaladas.
· Se derribaron dos torres redondas.
· Se demolió el puente levadizo y, dentro de la muralla, el jardín y la morada de los conejos.
· La torre de Homenaje de San Miguel fue rebajada a la mitad.

Tras sucesivas herencias, la propiedad del castillo, junto con el resto del pueblo de Javier, recayó en la Casa de Villahermosa.

https://es.wikipedia.org/wiki/Castillo_de_Javier

Imágenes: Reinhardhauke, Jaime Juan, Jule Berlin.